Un retrato
Un regalo
Tu retrato... sentimiento a flor de piel, sueños e ilusión... Un beso, uno en la espera, otro en la distancia.
En la distancia que no espera, en el tiempo que vuela, en la fantasía y la ilusión... la pasión viene después...
Una confesión
Un deseo
Tu confesión... el deseo que provoca 4 copas de un savignon, las palabras flotan, el aire se embriaga, se llena de pasión..
Vuela y y va hasta donde estas, mil preguntas... el corazón late aprisa culpa a la imaginación.
Un mensaje
un sueño
Un mensaje de un sueño roto interrumpe... lagrimas, te detienes... el calor se enfría en la noche tibia del anhelo de un encuentro.
Una imagen
Dulces sueños
Una imagen, la de esa noche, dulces sueños... ¿Con qué soñaste anoche?
viernes, 26 de febrero de 2010
La pared
La pared en aquél salón tomó vida...
La veía tan blanca, sin color, tan aburrida...
Imaginó que le hacía el amor
Así comenzó y sin ser artista y acariciando aquel trozo de construcción...
Su cuello delicado, frágil, sensible a sus labios...
Sus hombros siempre dispuestos a un beso, sus brazos delgados,torneados, sus manos y dedos suaves, tersos listos para regalar una caricia...
Su espalda erguida, fuerte y exquisita en sus formas... Bajaba definiendo la curva de su cintura, la abrazo por atrás luego de besarle pincel a pincel cada trozo de su piel...
Continuo con sus piernas sus muslos, les daba forma, los recorría una y otra vez en su intento por parecer lo más real y los atrapaba y los hacía suyos hasta llegar a los pies...
Luego, nuevamente subió el pincel, trazo delicadamente el contorno de su rostro, poniendo un beso y otro más mientras pintaba sus rasgos, acarició su mentón, sus labios rosas, sus ojos castaños siempre pícaros, siempre coquetos, siempre mirando hacía adentro. Su cabello largo y acomodado como de lado...
Quedó su dibujo permanente tal y como lo tenía en la mente...
Dejó de ser la pared y se convirtió en ella.
La veía tan blanca, sin color, tan aburrida...
Imaginó que le hacía el amor
Así comenzó y sin ser artista y acariciando aquel trozo de construcción...
Su cuello delicado, frágil, sensible a sus labios...
Sus hombros siempre dispuestos a un beso, sus brazos delgados,torneados, sus manos y dedos suaves, tersos listos para regalar una caricia...
Su espalda erguida, fuerte y exquisita en sus formas... Bajaba definiendo la curva de su cintura, la abrazo por atrás luego de besarle pincel a pincel cada trozo de su piel...
Continuo con sus piernas sus muslos, les daba forma, los recorría una y otra vez en su intento por parecer lo más real y los atrapaba y los hacía suyos hasta llegar a los pies...
Luego, nuevamente subió el pincel, trazo delicadamente el contorno de su rostro, poniendo un beso y otro más mientras pintaba sus rasgos, acarició su mentón, sus labios rosas, sus ojos castaños siempre pícaros, siempre coquetos, siempre mirando hacía adentro. Su cabello largo y acomodado como de lado...
Quedó su dibujo permanente tal y como lo tenía en la mente...
Dejó de ser la pared y se convirtió en ella.
martes, 23 de febrero de 2010
Dormiste abrazada a mi
¿Dormiste abrazada a mi o sólo fue el deseo jugando con la fantasía?
Te sentí cerca
Tu piel y la mía se fundían en aquél abrazo
Pude sentir tú respiración
Tu pecho contra mi pecho
Tus labios entreabiertos
¿Dormiste abrazada a mi, o sólo fue el deseo jugando con la fantasía?
Me detuve en tus ojos cerrados
Continúe por el contorno de tu cara, tu barba partida, tus mejillas...
El perfecto cuadro de tu rostro... dormida, junto a mi...
No hubo insomnio... dormiste abrazada a mi.
Te sentí cerca
Tu piel y la mía se fundían en aquél abrazo
Pude sentir tú respiración
Tu pecho contra mi pecho
Tus labios entreabiertos
¿Dormiste abrazada a mi, o sólo fue el deseo jugando con la fantasía?
Me detuve en tus ojos cerrados
Continúe por el contorno de tu cara, tu barba partida, tus mejillas...
El perfecto cuadro de tu rostro... dormida, junto a mi...
No hubo insomnio... dormiste abrazada a mi.
domingo, 21 de febrero de 2010
Insomnio
Se apoderó de mi el insomnio
y tu de mi pensamiento...
En la penumbra y en la soledad
Recorrí tu espalda en una caricia sutil
te imaginé recostada junto a mi
Desnuda, desnuda en cuerpo y alma
Dispuesta a hacer de la noche un instante eterno.
Entonces, tu a un lado de mi...
Entonces, yo a un lado de ti...
Estábamos ahí, tu en mi imaginación
Fue el deseo de aquél beso que quedó suspendido en el aire...
Y mis manos sobre tu espalda
y mis labios en tu cuello, en tus labios,en tu piel...
Y una vez más estabas ahí en mi imaginación en mi pensamiento...
En mis sueños...
Apoderándote de mi, de mis sueños, fantasías y deseos...
y tu de mi pensamiento...
En la penumbra y en la soledad
Recorrí tu espalda en una caricia sutil
te imaginé recostada junto a mi
Desnuda, desnuda en cuerpo y alma
Dispuesta a hacer de la noche un instante eterno.
Entonces, tu a un lado de mi...
Entonces, yo a un lado de ti...
Estábamos ahí, tu en mi imaginación
Fue el deseo de aquél beso que quedó suspendido en el aire...
Y mis manos sobre tu espalda
y mis labios en tu cuello, en tus labios,en tu piel...
Y una vez más estabas ahí en mi imaginación en mi pensamiento...
En mis sueños...
Apoderándote de mi, de mis sueños, fantasías y deseos...
viernes, 19 de febrero de 2010
Placentero despertar
La observaba dormir,en silencio, intentaba no perturbar sus sueños.
Recorría cada tramo de su piel con su mirada, con su mirada la acariciaba y la hacía suya otra vez...
Sostenía la mirada sobre sus labios y entonces le robaba un beso y otro beso más, los pliegues de su espalda, piernas y brazos también con su boca los recorrió.
Ella se volvía de espaldas y le daba oportunidad para continuar con el beso de su piel, era como si ella estuviera enterada de todo, como si lo estuviera disfrutando también, su rostro tenía un gesto de plenitud, una ligera sonrisa se asomaba entre sus labios mientras su piel tomaba color.
Entonces con sus ojos le hacía el amor nuevamente, poniendo besos en su cuello, en su espalda, en sus nalgas, en sus piernas, sus corvas hasta llegar a los dedos de los pies, su mirada lo decía todo, estaba pendiente de sus movimientos, acomodando caricias simplemente con sus ojos que la hacían suya.
No había más ruido que el de su respiración, de pronto agitada, a veces en calma. El sueño de ella se volvió más inquieto, su respiración cambiaba de matiz, se movía con más frecuencia y su rostro, estaba lleno de placer.
No quitaba la mirada de encima y la besaba por cada parte de su piel, de los pies a la cabeza, del cuello a la cintura y un poco más abajo y ahí puso toda su atención, en besar con la mirada su intimidad...
Ella se despertó en un grito de satisfacción de placer, abrió sus ojos y la miro, la tomo por el cuello y la beso...
Recorría cada tramo de su piel con su mirada, con su mirada la acariciaba y la hacía suya otra vez...
Sostenía la mirada sobre sus labios y entonces le robaba un beso y otro beso más, los pliegues de su espalda, piernas y brazos también con su boca los recorrió.
Ella se volvía de espaldas y le daba oportunidad para continuar con el beso de su piel, era como si ella estuviera enterada de todo, como si lo estuviera disfrutando también, su rostro tenía un gesto de plenitud, una ligera sonrisa se asomaba entre sus labios mientras su piel tomaba color.
Entonces con sus ojos le hacía el amor nuevamente, poniendo besos en su cuello, en su espalda, en sus nalgas, en sus piernas, sus corvas hasta llegar a los dedos de los pies, su mirada lo decía todo, estaba pendiente de sus movimientos, acomodando caricias simplemente con sus ojos que la hacían suya.
No había más ruido que el de su respiración, de pronto agitada, a veces en calma. El sueño de ella se volvió más inquieto, su respiración cambiaba de matiz, se movía con más frecuencia y su rostro, estaba lleno de placer.
No quitaba la mirada de encima y la besaba por cada parte de su piel, de los pies a la cabeza, del cuello a la cintura y un poco más abajo y ahí puso toda su atención, en besar con la mirada su intimidad...
Ella se despertó en un grito de satisfacción de placer, abrió sus ojos y la miro, la tomo por el cuello y la beso...
jueves, 18 de febrero de 2010
Sin palabras
Me quedé sin palabras
Me has dejado sin palabras... a mi, que he conocido aunque poco el significado de cada una de ellas, me dejas callada, en silencio, en paz, pero sin palabras, a mi que sin pensarlo poco a poco se acomodan ya sea en verso o en prosa, pero se acomodan... es más que el exterior, es más que la superficie, me haces indagar en mi interior, buscar y volver a buscar... para encontrarme nuevamente sin palabras... pensando en ti.
Me has dejado sin palabras... a mi, que he conocido aunque poco el significado de cada una de ellas, me dejas callada, en silencio, en paz, pero sin palabras, a mi que sin pensarlo poco a poco se acomodan ya sea en verso o en prosa, pero se acomodan... es más que el exterior, es más que la superficie, me haces indagar en mi interior, buscar y volver a buscar... para encontrarme nuevamente sin palabras... pensando en ti.
La niña
Como cada noche iba a la cama a descansar, a dejar el día atrás, nadie sabía que la niña temía a los sueños, y la abuela y la madre, le hablaban de lugares hermosos, de personajes maravillosos de los sueños...Pero la niña tenía miedo, no comprendía por qué en sus sueños no aparecían aquellas hadas, aquellos héroes que tanto le contaban.
Iba a dormir pues, y pedía con voz y ojos suplicantes le leyeran un cuento, dos tantos como fuera necesario hasta que el cansancio la venciera y poder dormir... Caperucita Roja, La Cenicienta, Rizitos de Oro no servían a la niña, que apenas cerraba los ojos y soñaba con guerra, con represión, con hambre y desolación...Habían bombas, soldados, balas, metralletas y estrellas pegadas con hilo y aguja a los sacos de las personas... La niña temía por su vida y la de su abuela, por la de la hermana que no existía más que en aquél sueño, la niña corría buscando un refugio, ocultándose de los militares, la niña, la niña siempre quería despertar y nunca podía, regresar a su realidad a su habitación, y la niña continuaba en la guerra...Llena de miedo, polvo, llena de muerte en los ojos... no podía regresar a su realidad.
Despertaba la niña muerta de miedo refugiándose en la orilla de su habitación, llorando a mares por vivir en un sueño la vida de otra que no era ella...
Iba a dormir pues, y pedía con voz y ojos suplicantes le leyeran un cuento, dos tantos como fuera necesario hasta que el cansancio la venciera y poder dormir... Caperucita Roja, La Cenicienta, Rizitos de Oro no servían a la niña, que apenas cerraba los ojos y soñaba con guerra, con represión, con hambre y desolación...Habían bombas, soldados, balas, metralletas y estrellas pegadas con hilo y aguja a los sacos de las personas... La niña temía por su vida y la de su abuela, por la de la hermana que no existía más que en aquél sueño, la niña corría buscando un refugio, ocultándose de los militares, la niña, la niña siempre quería despertar y nunca podía, regresar a su realidad a su habitación, y la niña continuaba en la guerra...Llena de miedo, polvo, llena de muerte en los ojos... no podía regresar a su realidad.
Despertaba la niña muerta de miedo refugiándose en la orilla de su habitación, llorando a mares por vivir en un sueño la vida de otra que no era ella...
Fue el viento
Fue el viento que trajo consigo un susurro, el de tu voz...
Fue el viento que trajo consigo tu aroma, el de tu piel...
Fue el viento que con fuerza abrió mi ventana de par en par llevándose consigo tu ausente presencia, esa que sólo en recuerdos se aprecia.
Fue el viento que trajo consigo tu aroma, el de tu piel...
Fue el viento que con fuerza abrió mi ventana de par en par llevándose consigo tu ausente presencia, esa que sólo en recuerdos se aprecia.
Autorretrato
Su silueta apareció de la nada, la luz definía sus líneas, su figura, su cintura, sus senos, su cabello largo, cayendo libre sobre sus hombros y parte de la espalda.
Estaba desnuda, podía apreciarse el líquido ámbar que contenía la copa que sostenía su mano derecha y el humo del cigarro saliendo por los orificios de su boca y su nariz.
Caminaba descalza de un lado a otro de la habitación, sus pasos eran ligeros, armoniosos, delicados, lentos y cayados, como si danzara dentro de aquel salón en penumbras una melodía en silencio, sin notas, sin acordes.
Detuvo sus pasos frente a un caballete, roso con las yemas de los dedos el lienzo en blanco, la ventana se entre abrió dejando entrar un poco de luz, miro al espejo y vio su reflejo, colocó la copa en la mesa y el cigarro en el el cenicero, tomó un pincel, lo paso por encima del oleo color carne y trazo una línea seguida de otra y otra.
Su rostro, cambiaba según el trazo, su ceño se fruncía, hacía una mueca, torcía los labios, sonreía. De vez en vez bebía de la copa y daba una bocanada a aquél cigarro o prendía otro. No quitaba la mirada del lienzo que comenzaba a cobrar vida.
Estaba desnuda, podía apreciarse el líquido ámbar que contenía la copa que sostenía su mano derecha y el humo del cigarro saliendo por los orificios de su boca y su nariz.
Caminaba descalza de un lado a otro de la habitación, sus pasos eran ligeros, armoniosos, delicados, lentos y cayados, como si danzara dentro de aquel salón en penumbras una melodía en silencio, sin notas, sin acordes.
Detuvo sus pasos frente a un caballete, roso con las yemas de los dedos el lienzo en blanco, la ventana se entre abrió dejando entrar un poco de luz, miro al espejo y vio su reflejo, colocó la copa en la mesa y el cigarro en el el cenicero, tomó un pincel, lo paso por encima del oleo color carne y trazo una línea seguida de otra y otra.
Su rostro, cambiaba según el trazo, su ceño se fruncía, hacía una mueca, torcía los labios, sonreía. De vez en vez bebía de la copa y daba una bocanada a aquél cigarro o prendía otro. No quitaba la mirada del lienzo que comenzaba a cobrar vida.
domingo, 14 de febrero de 2010
Un beso
Había un beso
Estoy casi segura de ello...
Mi rostro cerca del tuyo.
Tu sonrisa, tus ojos adormilados...
¿Hubo un beso?
... ¿o sólo imaginé la posibilidad de uno?...
... ¿o sólo tuve el deseo de rosar tus labios con los míos, de respirar tu aliento, probar el sabor de tu boca en un beso?...
De pronto la distancia desaparecía, de pronto se hacía presente
Tú mirada diciendo todo y nada, mis nervios, mis ganas de robarte un beso...
De pronto traducía lo que decían tus ojos, ¿y los míos, decían lo mismo?
¿Había un beso?
Que se quedó en el aire esperando...
..Hoy sólo sé que aún deseo un beso...
Estoy casi segura de ello...
Mi rostro cerca del tuyo.
Tu sonrisa, tus ojos adormilados...
¿Hubo un beso?
... ¿o sólo imaginé la posibilidad de uno?...
... ¿o sólo tuve el deseo de rosar tus labios con los míos, de respirar tu aliento, probar el sabor de tu boca en un beso?...
De pronto la distancia desaparecía, de pronto se hacía presente
Tú mirada diciendo todo y nada, mis nervios, mis ganas de robarte un beso...
De pronto traducía lo que decían tus ojos, ¿y los míos, decían lo mismo?
¿Había un beso?
Que se quedó en el aire esperando...
..Hoy sólo sé que aún deseo un beso...
domingo, 7 de febrero de 2010
¿Quedaron cenizas?
Si, las mismas que con tus besos volviste a encender
¿Eres un recuerdo?
Un recuerdo que aparece en mi presente y acaricio en mi futuro
¿Regreso o me doy la media vuelta?
A veces, ganas no me faltan de tomar mi camino, seguir adelante y guardarte como el más bello recuerdo, otras no sé si me acobardo o es que veo el amor en tu mirada, veo el reflejo de mi... de ti y de mi...y regreso a ti en un abrazo, encuentro lo que soy, y continúo persiguiendo tu amor.
Si, las mismas que con tus besos volviste a encender
¿Eres un recuerdo?
Un recuerdo que aparece en mi presente y acaricio en mi futuro
¿Regreso o me doy la media vuelta?
A veces, ganas no me faltan de tomar mi camino, seguir adelante y guardarte como el más bello recuerdo, otras no sé si me acobardo o es que veo el amor en tu mirada, veo el reflejo de mi... de ti y de mi...y regreso a ti en un abrazo, encuentro lo que soy, y continúo persiguiendo tu amor.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)